Félix de Azara (1742- 1821) ingeniero militar fue enviado al Río de La Plata en 1781 como uno de los comisarios encargados de dar cumplimiento, sobre el terreno, de los límites entre los territorios de las coronas portuguesa y española. Permaneció casi 14 años en Paraguay, donde llevó a cabo como autodidacta y en solitario un relevante trabajo como naturalista. Extraordinario observador de "pájaros" y "cuadrúpedos" publicó libros sobre los mismos a su regreso, y puso de manifiesto su gran conocimiento de la fauna de aquellos territorios describiendo nuevas especies y observando importantes aspectos de la biología de muchos vertebrados rioplatenses. Entre sus más importantes contribuciones se encuentra el reconocimiento de lo que más tarde llamaría Charles Darwin "lucha por la existencia", que se oponía a la concepción providencialista y armoniosa de la naturaleza, defendida por los naturalistas de la época. Su libro "Voyages fans L'Amerique Meridionale" (París, 1809) lo llevó y utilizó Darwin durante su estancia en el Río de la Plata. Azara es el único español citado por Darwin en su obra "El Origen de las Especies".