Presentación
Durante su viaje de investigación geológica por Francia e Italia desde abril de 1828 a febrero de 1829 el joven Lyell desarrolló un profundo interés por el vulcanismo, cuya vitalidad pudo comprobar en el Vesubio y el Etna, y que le duraría toda su vida. Veinticinco años después se decidió a visitar Madeira y Canarias para estudiar sobre el terreno los efectos de la actividad telúrica en islas de origen volcánico. Esta expedición lo convenció de que la teoría de von Buch sobre el origen de Canarias por levantamiento del fondo oceánico era errónea y el estudio de plantas, insectos y conchas fósiles recolectados en ambos archipiélagos lo persuadieron de la validez general de la teoría de la evolución de las especies de su amigo Darwin, que pronto vería la luz.
Se recogen en esta sección las cartas y anotaciones de sus diarios que tratan asuntos relacionados con Madeira y Canarias. Datan en su mayoría de los dos años posteriores al viaje, en los que se halla ocupado estudiando los fósiles que había recogido en las islas. En ellas queda reflejado su interés por dos temas generales: por un lado, la relación entre el vulcanismo y los fenómenos de levantamiento y subsidencia de la corteza terrestre; por otro, la relación entre la distribución geográfica de las especies y los procesos de su origen y extinción.
Hemos traducido la mayoría de los textos a partir de la edición del profesor Leonard Wilson Sir Charles Lyell's Scientific Journals on the Species Question, Yale University Press, 1970. Unas pocas proceden de la obra editada en 1881 por su cuñada Katherine Lyell bajo el título Life, Letters and Journals of Sir Charles Lyell. Hemos incluido al final las cartas que le envió el ingeniero tinerfeño Pedro Maffiotte, colaborador de Lyell a raíz de su viaje a Gran Canaria.