MÁQUINA PARA HACER CLAVOS Funcionamiento de la máquina
 
 
 

Cuando el brazo del volante E se mueve, de manera que baje el husillo, la pieza I baja, y va rozando con otra pieza de hierro señalada con la letra c (Imagen G).

Sobre esta pieza se pone una plancha de hierro d, cuyo ancho ha de ser el mismo que el largo que han de tener los clavos y cuyo grueso sea proporcional al tamaño de los mismos.

Cuando movemos el brazo del volante, la pieza I, que pasa rozando contra la pieza c, corta la plancha de hierro, y salta el clavo.

La pieza e, tiene un tope n, donde se detiene la plancha de hierro d, y sirve para formar la cabeza del clavo. El primero que se corta de la plancha es una punta sin cabeza. Entonces, en la plancha queda la cabeza del otro clavo, como se ve en n (Imagen F), y es lo que ha quedado sin cortar en el tope.

Una vez hecho esto, se le da la vuelta a la plancha d (poniendo a la derecha lo que estaba a la izquierda), y usando el volante se corta un clavo, dejando formada a la izquierda la cabeza para el siguiente. Se vuelve a dar la vuelta a la plancha (poniendo a la izquierda lo que estaba a la derecha), y se corta otro clavo, y así sucesivamente.

El conducto P sirve para que los clavos vayan cayendo por él, según se van cortando.

La pieza q tiene la finalidad de impedir que los clavos salten fuera en el momento de cortarlos.